Este verano puedes disfrutar de los alimentos de temporada, como la zanahoria. Aunque podemos encontrarlas durante todo el año, te aconsejamos que en estos meses optes por smoothies de zanahorias, tomates y aguacates.
Esta hortaliza aporta vitaminas (A, B, C y E), minerales y compuestos antioxidantes. Es muy versátil en la cocina y ofrece una magnífica fuente de vitaminas.
Además, las personas que quieren perder peso pueden preparar recetas con zanahoria porque tiene muy pocas calorías. ¡Tiene entre 37 y 41 calorías por cada 100 gramos!
Anímate a preparar recetas con este alimento porque tiene muy pocas calorías, muchas vitaminas y muy pocas grasas.
Los diabéticos pueden comer zanahoria cruda, ya que sus carbohidratos se asimilan lentamente tras la digestión y no elevan en exceso los niveles de azúcar en sangre.
En crudo conserva más nutrientes, así que utiliza la zanahoria en licuados, smoothies o ensaladas. Se le puede aplicar casi cualquier técnica de cocina: el salteado, el horneado o, incluso, la fritura.
Si las vas a comer ralladas, rocíalas con zumo de limón para evitar que se oxiden.
Si las vas a hacer cocidas, calcula de diez a quince minutos, para que no pierdan sus propiedades nutricionales.
Las más pequeñas suelen ser mucho más dulces, así que utilízalas para elaborar la
tarta de zanahoria, o carrot cake. Te encantará la esponjosidad del bizcocho, pero no hay que cocer las zanahorias antes de hacer este pastel.
Es uno de los postres más saludables que podemos tomar por todos los beneficios que nos aporta esta hortaliza. Su elaboración se popularizó durante la II Guerra Mundial en Gran Bretaña, porque el azúcar era un ingrediente caro y lo sustituyeron por la zanahoria.
Este pastel lo encontrarás con capas y cobertura de una suave crema de mantequilla o queso. Pero si quieres una versión más healthy, puedes elaborar una crema con crema de queso y dátiles.
Te aconsejamos que compres las zanahorias con un tono bien naranja y es mejor rallarlas para conseguir un tono más intenso. Este postre suele aromatizarse con canela, jengibre o nuez moscada.
Para endulzar tus meriendas, ¿qué te parece elaborar un smoothie de zanahoria, miel y naranja? A nosotros nos parece una merienda deliciosa y muy saludable.
Incluso, es aconsejable optar por esta hortaliza para preparar una cena saludable. En un molde de cristal añade dos zanahorias ralladas, dos latas de atún natural, un poco de queso mozzarella y 4 huevos.
Pero para aportar más sabor, te aconsejamos que elijas tus especies favoritas. Por ejemplo, puedes añadir ajo en polvo, cebolla en polvo y una pizca de pimentón dulce. ¡Hornea a 180 °C unos 15 minutos y ya tendrás listo un pastel salado y bajo en calorías!
La zanahoria proporciona numerosos beneficios para nuestro organismo. Estos son:
–Refuerza el sistema inmunológico: esta hortaliza es buena para las defensas, gracias a las vitaminas A y C.
–Es buena para la vista: es la hortaliza que tiene más betacarotenos y vitamina A que,
cuida y protege la retina.
–Ayuda a prevenir el cáncer: los betacarotenos tienen propiedades antitumorales, por lo que las zanahorias
son ideales para ayudar a prevenir el cáncer.
–Es buena para la piel: varios estudios han descubierto que la zanahoria protege nuestra piel y las mucosas.
–Protege el esmalte dental: Los dentistas de Compostela Dental Center tuvieron la deferencia de contarnos que esta hortaliza protege el esmalte dental, genera más saliva en la boca y protege frente a las caries.
–Fortalece las uñas: esta hortaliza fortalece las uñas pero también el pelo, por lo que ayuda a la producción de sebo.
–Es buena para la digestión: este alimento previene el estreñimiento porque aporta mucha fibra al organismo.
–Es diurética: la revista ¡HOLA! informa que «por su contenido en potasio, es diurética y nos ayuda a limpiar los riñones, eliminando posibles cálculos renales».
–Es buena para la lactancia: los betacarotenos mejoran la calidad biológica de la leche materna.
Consejos para conservar las zanahorias
Lo mejor es tenerlas en un lugar fresco y aireado, así que opta por el cajón de la verdura en la nevera. Pero esta hortaliza no puede estar cerca de patatas o manzanas, ya que el gas etileno que estas producen acelera su deterioro.
Pero antes de guardarlas conviene limpiar su superficie con un trapo húmedo. Las pequeñas se pueden tomar sin pelar, pero no te olvides de lavarlas.
Hay quien, en vez de pelarlas, las raspa con un cuchillo, pero de esta forma tendrán un sabor algo más amargo. A la hora de comprarlas, escoge zanahorias que sean de color naranja brillante, duras, con pocas irregularidades y que tengan hojas.
